Los biodigestores son famosos por producir biogás. Pero el mayor beneficio de un biodigestor es el biol, el efluente del sistema.
Los biodigestores que instalamos en las granjas de Guatemala se alimentan principalmente con estiércoles de animales (vacas, cerdos, pollos, ovejas, etc.). Los nutrientes contenidos en esta materia orgánica se encuentran en el biol, sin los patógenos. El biol no tiene olor, no atrae moscas, es un abono orgánico líquido directamente asimilable por las plantas que contiene de forma natural materia orgánica, nutrientes minerales, hormonas de crecimiento, microflora, bacterias, hongos, etc.
El biodigestor ya no es sólo una excelente solución para tratar los desechos orgánicos, sino que se ha convertido en una planta de producción de biofertilizante a partir de los residuos agrícolas. Además, produce biogás.
El IICA Guatemala y Negawatt Ahorro Energético comparten la mismo deseo de equipar las granjas del país con biodigestores para promover prácticas sostenibles y mejorar la productividad de los agronegocios. Tenemos un convenio de cooperación técnica firmado desde 2 años para fomentar el uso de los biodigestores en el sector ganadero. Y en Febrero 2024, IICA y Negawatt han lanzado una investigación y pruebas de biol para fertilizar de forma orgánica cultivos de tomates en el Altiplano Occidental a partir de la experiencia exitosa de Don Celio, uno de nuestro usuario de biodigestores, ubicado en San Marcos, Guatemala.
Según un protocolo de investigación muy estricto que será aplicado en no menos que 10 productores de tomates durante 6 meses, se va a medir los resultados en calidad y cantidad de la aplicación de biol en tomates. Gracias al testimonio de Don Celio que suministrará el biol a los 10 productores y de muchos otros usuarios de biol, sabemos que los resultados son excepcionales: duplicación de la producción, hortalizas sanas y sin pesticidas, mejor sabor, reducción de los costes de fertilización y mano de obra, menos riesgos para la salud de los trabajadores agrícolas y los consumidores, etc. Hemos observado que abonar con biol genera numerosas externalidades positivas, entre ellas mayores ingresos para los agricultores.
El objetiva de esa prueba es realizar ensayos bajo la supervisión de investigadores e ingenieros agrónomos del Centro Universitario San Marcos y del IICA, y luego publicar los resultados para certificar el biol y dar a conocer sus beneficios.
No hay desechos, solo recursos.
